La falta de stock frena coyunturalmente el mercado náutico en lo que va de año

Entre enero y abril de 2022, el mercado náutico balear registró 319 matriculaciones de embarcaciones de recreo, lo que supone un ligero descenso del 4,2% con respecto al mismo período del año 2021. Este dato,extraído del ‘Informe del mercado de embarcaciones de recreo. Enero-abril, 2022’, elaborado por ANEN a partir de los datos facilitados por la Dirección General de la Marina Mercante, contrasta con la caída de las matriculaciones a nivel nacional, donde el descenso ha alcanzado el 14,9% hasta las 1.688 unidades.

Este resultado se debe, fundamentalmente, a la falta de suministros que sufre el sector y que impide ofrecer unidades terminadas a pesar de que la intención de compra por parte de los armadores sigue siendo positiva. En palabras de Carlos Sanlorenzo, secretario general de ANEN, “se cumplen las previsiones que anunciamos durante el pasado Congreso Náutico, celebrado en marzo en Valencia. El mercado náutico, al igual que otros sectores vinculados a la industria, entre ellos el de la movilidad, vienen sufriendo una desaceleración inicialmente provocada por la crisis logística y falta de suministros, y agravada en los últimos meses por la guerra de Ucrania. Sólo el mercado del chárter resiste en positivo, lo que muestra que la afición a la náutica y el consumo de turismo náutico sostenible, sigue estando entre las propuestas elegidas por los usuarios”. 

En este sentido, es cierto que los datos del chárter náutico son mucho más halagüeños. En Baleares, el mercado del alquiler de embarcaciones ha experimentado una subida interanual del 47,24% entre enero y mayo, hasta alcanzar las 187 unidades, y aglutinando el 34,19% del total nacional, que se sitúa en 547 unidades y registra un incremento del 3% en dicho periodo.