AENIB apoya la iniciativa de la APB de reordenar del Puerto de Palma
La patronal náutica balear AENIB ha enviado una misiva al Departamento de Gobierno Corporativo de la Autoridad Portuaria de Baleares (APB) en la que le agradece su valentía al plantear la reordenación del Puerto de Palma y mostrar su apoyo a un proyecto que, bajo su punto de vista, llega tarde...
Esta carta de apoyo se produce después de que la APB haya iniciado una ronda de contactos con representantes de la comunidad portuaria y otros agentes sociales de carácter social, institucional y económico con el fin de obtener el máximo consenso en la reordenación del Puerto.
Una vez desistida recientemente por parte del Consejo de Administración de la APB la propuesta de reordenación aprobada en 2020, el Puerto de Palma asume ahora el objetivo de impulsar un nuevo rumbo para garantizar en todo momento la conectividad marítima y la operatividad de la cadena logística de las Baleares. Además, redistribuir las áreas industriales de reparación de embarcaciones y reconstruir la fachada marítima de Palma, cediendo espacios a proyectos de integración puerto-ciudad.
En la misiva, AENIB recuerda que este proyecto es una reclamación histórica del sector náutico. “Las empresas náuticas de las Islas están perdiendo contratos debido a que no hay capacidad de atender la demanda de algunos clientes, y tienen que salir a algunos astilleros o instalaciones de la Península mejor preparadas así como de otros países para poder llevar a cabo sus proyectos.”, remarca el texto, firmado por el el presidente de la patronal náutica balear, Jaume Vaquer, quien incide en que se trata de “una iniciativa comparable a la que se llevó a cabo en Palma hace 50 años, cuando se construyó el Polígono de Son Castelló para ubicar y situar los talleres, fábricas y actividades industriales, fuera de la ciudad y tenerlos concentrados y sectorizados en un espacio industrial”.
Por otro lado, AENIB remarca y valora positivamente que los espacios que se ganen no serán ampliaciones, sino fruto de la reubicación, y aboga por que se destinen a servicios públicos, como una escuela de vela municipal para la formación en actividades náuticas.
Finalmente, Vaquer confía en que esta reordenación se afronte como un proyecto de Estado en el que no haya de por medio colores políticos ni matices sin contenido que retrasen el proyecto, ya que, en su opinión, no hay más tiempo que perder en acometer este proyecto.